Hara Alonso, libre e improvisadora, cuenta con una experiencia bastante interesante en el terreno de la vanguardia. Vive entre el mundo del piano, el movimiento y la electrónica. Piano preparado, composición algorítmica, control por sensores, la idea de esta mente inquieta es trabajar duramente para seguir desarrollando su propio lenguaje.
Hace unos meses presentó su primer trabajo Pianöise, donde mezcla lo orgánico del piano y lo electrónico en una combinación que empieza a tener un sonido muy personal.
Si te soy sincero escuché el disco varias veces cuando lo subiste a Spotify y me pareció que estas dando con una clave y manera de hacer música que se me hace un poco más personal a lo que conozco de ti. Cuéntame un poco que te inspiro este disco y el concepto que hay detrás.
Creo que lo que marca la diferencia es que ahora me doy tiempo para meditar sobre lo que quiero hacer realmente, tomarme tiempo para experimentar y analizar. Todo empezó cuando un amigo me mostró una extensión de SuperCollider llamada TidalCycles para crear patterns algorítmicos. Un día lo empecé a mezclar con el piano dejándome guiar por el material que iba surgiendo, sin tomar muchas decisiones, dejándome sorprender. En ese proceso descubrí lenguajes nuevos y herramientas fascinantes. El proyecto “Pianoïse” es eso, una búsqueda constante de posibilidades sonoras entre el piano y la electrónica más allá de estéticas.
¿Proyecto editado por el Keroxen?
Cuando tenía como 10 temas se los pasé a Néstor Torrens y él fue el que me dio la idea de hacer un disco con el sello Keroxen. Para mi es un lujo se parte de la comunidad de gente maravillosa que forma ese festival y creo que representan una forma de entender la música con la que me identifico mucho.
¿Que te ha aportado Pianöise a nivel personal y profesional?
Me ha aportado mucha libertad y muchos descubrimientos. En lo personal me ha llevado a tener una relación con el piano diferente a la que tenía antes, más abierta. En lo profesional me ha acercado a un público más amplio y creo que eso ha sido muy positivo.
Si no me equivoco, estudiaste piano clásico. ¿Como fuiste abducida por el reverso tenebroso de las vanguardias?, ¿qué te cautiva esta manera de hacer música?
Tuve la suerte de tener un profesor de piano, Adolfo Muñoz, que me ponía a tocar Lachenman y Kurtag con 13 añitos. Cuando fui a estudiar el superior a Salamanca tuve la suerte de tener un profesor excelente de análisis de música contemporánea, Ángel Liz, y otro de piano contemporáneo, Alberto Rosado. Aunque no fue hasta que me fui a Helsinki que decidí dedicarme a la creación contemporánea.
Siempre he sido muy inquieta, así que conectar con todo el rango de posibilidades que ofrece la creación contemporánea, la improvisación, la composición, la electrónica, la performance, fue como encontrar mi(s) camino(s). Para mi la clave es que la creación es algo vivo, cambiante, no establecido, no categorizado.
¿Cual es el proyecto que más te ha llenado a nivel personal?
Creo que el máster CoPeCo(Contemporary Performance and Composition) a lo largo de 2 años en 4 ciudades: Tallinn, Estocolmo, Lyon y Hamburgo. En este master éramos 8 músicos con la particularidad de ser compositores e intérpretes, de todas partes del mundo, con diferentes backgrounds e intereses. El planteamiento del master era muy "renacentista": englobar la composición, la improvisación, la interpretación y la música electrónica. Lógicamente es muy ambicioso pretender hacer todo y hacerlo bien, en realidad el foco estaba más en la experimentación y en que cada uno de nosotros desarrollásemos un proyecto personal. La parte de compartir con los otros músicos también fue una gran experiencia, aprendí muchísimo de ellos, la verdad, y lógicamente creamos un vinculo muy fuerte entre nosotros. Podría decir que esa experiencia fue la semilla de muchas cosas que vinieron después.
¿Vives actualmente en Suiza, Suecia?, disculpa pero tengo una especie de dislexia con estos dos países. ¿Como te sientes allí con respecto a tu terreno musical?. ¿Desde Canarias como percibes las vanguardias musicales en Europa, y como percibes desde el resto de Europa las vanguardias en Canarias?.
Suecia, en Estocolmo concretamente. Creo que es difícil tener una idea global del panorama contemporáneo europeo porque varía mucho de un país a otro y de una ciudad a otra. Lo que puedo contar de Suecia es que es un país donde se apoya mucho la cultura y la creación. Lo que más me gusta de aquí es que la gente se asocia para formar festivales y eventos y eso genera muchos espacios interesantes, tanto de música como de danza o teatro. Hay una escena musical variada y una comunidad de gente alrededor de la música contemporánea y experimental. Para mi ha sido relativamente fácil integrarme en la escena musical, al final es una ciudad pequeña donde es fácil conocer a la gente, y sinceramente creo que he tenido la suerte de encontrar gente muy generosa, que me ha ayudado a muchos niveles. En Canarias creo hay muchos creadores muy interesantes y cada vez veo que se crean más plataformas y festivales. Iniciativas como Fábrica la Isleta o Barrios Orquestados, demuestran que se pueden llevar a cabo proyectos ambiciosos, conseguir financiación y finalmente dinamizar la vida cultural de las islas. Así que hay que seguir!.
¿Que te aporta el piano y que te aporta la electrónica y en especial la composición algorítmica?
Tocar el piano para mi es estar en casa. La electrónica aún es un mundo inmenso en el que sigo buscando mi lenguaje y la composición algorítmica una ventana al infinito.
Sensores y movimiento corporal. ¿Qué?, ¿cómo?, ¿cuándo?, ¿por qué?. ¿Crees que el movimiento condiciona realmente el resultado sonoro?.
Si, claro, si lo programas para que así sea. Puedes plantear que al moverte un centímetro cambia completamente la estructura, o que sea más discreto. Con los sensores empecé por la necesidad de construir interfaces para controlar la electrónica de una forma más orgánica, a través del cuerpo. Para ello he utilizado desde micrófonos, teclados de ordenador, wiis, sensores musculares… dependiendo de las necesidades. Por ejemplo, con una cámara de infrarrojos diseñé un piano imaginario para tocar en el aire. Ahora colaboro en un proyecto de investigación con artistas de circo en el cual ellos llevan los sensores y generan los cambios en el sonido. Es muy potente porque realmente su movimiento tiene muchos matices y extensiones. A veces es un poco rompecabezas trabajar con sensores pero cuando eres capaz de conseguir realizar lo que quieres, creo que ofrece unas posibilidades muy poéticas.
CAAMSonora, cactus y clipper.
Si, esa acción sonora fue muy divertida. Básicamente arramplé con varios objetos y los re-sampleé, loopeé y estropeé. Creo que el público se lo pasó muy bien y yo también.
¿Improvisación libre o composición?. ¿Desde el punto de vista del oyente crees que hay alguna diferencia real?.
Bueno, creo que seguramente hay piezas escritas que podrían pasar por improvisaciones y viceversa. Para mi la improvisación o la composición no son bloques estáticos, creo que las dos partes conviven y se nutren mutuamente.
Me tiro un pedo en medio del campo y quiero expresar la libertad del pensamiento gaseoso en su estado más puro. ¿No crees que hay mucho postureo conceptual en esto de las vanguardias, pero que luego a nivel musical el resultado es más de lo mismo?.
Hay un libro muy bueno sobre este tema: Experimental music since 1970 de Jennie Gottschalk. Ella intenta definir el concepto de “experimental” y plantea la cuestión de qué es realmente experimental hoy en día. Creo que es complicado porque ese término ha perdido la esencia que tenía. La parte subversiva y underground seguramente hoy en día es muy distinta de lo que podía ser en los 70.
Yo creo que cada persona hace lo que puede en cada momento. Creo que lleva tiempo encontrar lo que realmente uno quiere hacer y mientras tanto hay que probar. Por eso lo mejor es no juzgar y dejar que cada uno se exprese (aunque sea a través del postureo).
Bueno, terminamos con la pregunta libre ¿algo más que quieras decir?, y por favor que no sea darme las gracias por la entrevista ni cosas de esas…
Si, quiero decir que creo que el trabajo que estás haciendo por la música en Canarias es muy importante. Todas las iniciativas que planteas, jam sessions, cursos, plataformas online, etc. impulsan la vida cultural de la isla. Así que muchas gracias por eso, y por la entrevista también, ha sido un placer.